Hace 20 años, en el tránsito del cambio de milenio, fundamos la Escuela de Gestalt de Girona, entonces como aún ahora, con el espíritu de llevar el enfoque terapéutico gestáltico a todas las profesiones de la Relación de ayuda.

Nos fundamenta la creencia de que la terapia Gestalt plantea una filosofía de vida y esta creencia es la que, durante todo este tiempo, ha guiado nuestra oferta formativa.

La Escuela de Gestalt de Girona no forma sólo terapeutas Gestalt sino que forma personas con una cierta manera de atendernos, de prestar atención a todas nuestras dimensiones -corporal, emocional, cognitiva, relacional y espiritual- de poner conciencia y de hacernos responsables de nuestra vida. Personas con un alto grado de auto apoyo, capaces de relacionarnos con el entorno de manera mútuamente nutritiva y atentas al palo en la rueda que nuestra forma de ser puede significar para una vida con sentido y satisfactoria.

Esta manera es la que garantiza la Formación en Acompañamiento Terapéutico para profesionales que ayudan o quieren ayudar a otras personas; Acompañar sin obviar nuestra persona cuando actuamos profesionalmente, haciendo de nosotros la mejor herramienta para dar servicio a los demás. Una formación para profesionales que, desde la salud, la educación, la intervención social, … facilita estar presentes en la relación para favorecer el mismo proceso que hemos realizado nosotros: recuperar la capacidad para auto regularse con el entorno, confiados en la capacidad de toda persona para crecer y desarrollarnos.

Y con toda esta base la Escuela de Gestalt de Girona también forma Terapeutas Gestalt que, con la capacitación psicológica necesaria, nos ocupamos de atender a las personas que presentan trastornos psicológicos. Valorando el trastorno no como una enfermedad a tratar sino como una particular vivencia significativa con un alto grado de inconsciencia que no le permite atenderse ni vivir una vida autónoma: una manifestación de una imposibilidad de auto apoyarse o autorregularse.

Natatxa Molina, directora de la Escuela de Gestalt de Girona